martes, 14 de febrero de 2017

COMENTARIO PLANTA Y ALZADO DE LA CATEDRAL DE CHARTRES


Alba Ferrer Martín.

La Catedral de la Asunción de Nuestra Señora es una iglesia catedralicia de culto católico en la ciudad de Chartres en Francia y asimismo es la sede de la Diócesis de Chartres.
Esta catedral marcó un hito en el desarrollo del gótico e inició una fase de plenitud en el dominio de la técnica y el estilo gótico, estableciendo el equilibrio entre ambos. Es sumamente influyente en catedrales como las de Reims o Amiems a las que sirvió como modelo directo.
Existen incidíos de que en el lugar que hoy ocupa la catedral existía desde tiempos anteriores a la era cristiana un altar dedicado a la Diosa Madre de la mitología druídica. Esta particularidad se ha relacionado con el hecho de que Chartres se convirtiera en un importante centro de veneración a la virgen María. La ciudad de Chartres ya era un centro de culto mariano y peregrinaje desde tiempo atrás debido a la presencia en su catedral de la llamada Sancta Camisia que supuestamente es una prenda de la virgen María, más concretamente el velo.
La iglesia ha pasado por varias construcciones debido a que ha habido numerosos incendios a lo largo de la historia de Chartres. El primero fue hacia el año 740-750 y destruyó por completo a la primera iglesia construida en el año 360. El último fue en 1194, un gran incendio devastó gran parte de la ciudad de Chartres, incluida casi la totalidad de la antigua catedral románica. El edificio que construyó el obispo Fulberto era una gran catedral en estilo románico que contaba con una enorme cripta que albergaba la famosa reliquia. Pese a haber sobrevivido a los incendios anteriores el fuego de 1194, causado por un rayo, sólo dejó en pie las torres occidentales, la fachada entre estas y la cripta. Al principio se tuvo al incendio como un castigo divino, pero al aparecer intacta en la cripta el velo de la Virgen se pensó que era un signo para que se reconstruyera la catedral dándole un nuevo esplendor.
Construcción.
Rápidamente se reconstruyó y hacia 1220 el cuerpo principal estaba concluido, en un plazo de sólo unos 26 años, tiempo notablemente corto. Conserva del edificio anterior la cripta y la fachada oeste con el Pórtico Real.
El maestro que trazó sus planos fue Marc Puertes. Realizó un trabajo extraordinario de gran unidad estilística empleando técnicas constructivas del siglo XII pero dándole nuevos usos y soluciones. Si bien el plan constructivo original fue respetado nunca se concluyó el conjunto de pináculos que fueron previstos inicialmente.
El edificio es de planta cruciforme con el cuerpo principal de 28 metros dividido en tres naves. La cabecera, al este, tiene un deambulatorio radial con cinco capillas semicirculares. La bóveda central fue la más alta construida hasta la fecha, con 36 metros de altura. Esta es cuatripartita y está soportada por arbotantes en el exterior.
La división en tres naves era sumamente original para la época y tenía la central más alta que las laterales. Esta dificultad se solía solventar levantando sobre las naves laterales una amplía tribuna cuya cubierta compensaba el peso de la nave central reforzando su estructura como en las catedrales de Laon o París. En Chartres se suprime la tribuna quedando solamente los tres niveles en el alzado de la nave; arcadas, triforio y banos. En este caso el triforio estaba construido sobre la galería y debajo de los banos para aprovechar el espacio del tejado sobre la tribuna. Tiene cuatro arcos por sección los cuales cuentan con dos banos y un rosetón que repite la estructura de la puerta principal y que alberga uno de los mayores conjuntos de vidrieras de la época medieval que se conservan. De los 186 vitrales se conservan en la actualidad 152, ya que en 1853 se sustituyeron algunos de ellos por parte del obispado que pretendía “modernizar” la catedral.
Como resumen podemos decir que la característica fundamental del arte gótico es la utilización del arco apuntado y la bóveda de crucería, prescindiendo de los muros para reemplazarlo por vidrieras dándole esbeltez, altura y luminosidad. En la nave central se puede  ver ya que fue donde se suprimen por primera vez las tribunas y se articula el muro en tres niveles, correspondiendo el inferior a las arcadas, el central al triforio y el superior a la galería de banos.

La altura y amplitud de las naves se debe a dos novedades constructivas:
·         La primera fue el abandono de la bóveda sexapartita cuadrangular a favor de la cuatripartita rectangular. La sexapartita se basaba en cuatro puntos de apoyo fuertes y dos débiles, lo que provocaba a veces una alternancia en el grosor de los soportes. Con esto se formó una unidad entre los complejos soportes sin perjudicar la integridad de cada parte.
·         La otra novedad es el empleo de un tipo de arbotante totalmente desarrollado. Salvo los superiores, añadidos después de la construcción original, los inferiores son dobles unidos por columnillas radiales. Estos se unen a los contrafuertes externos que son muy gruesos en la base y que se complementan con los contrafuertes internos.

La fachada principal es fruto de diversas intervenciones a lo largo del tiempo. Se salvaron del incendio la torre sur y la base de la norte, los tres portales y los ventanales que hay encima. Se desmontó el muro superviviente y se desplazó hacia delante añadiendo el gran rosetón y la galería de los reyes sobre este. Al aumentarse la altura de la fachada las dimensiones de la torre sur cambiaron notablemente por lo que se construyó la torre norte concluida en el año 1513 para equilibrar la composición impuesta por la primera torre, se estableció con una asimetría que crea un fuerte dinamismo visual.
El Pórtico Real se construyó en la década de 1140 para la anterior catedral románica y tiene forma de embudo, lo que posteriormente sería una norma común para las catedrales góticas. Las esculturas y relieves están inspirados en los del pórtico oeste de la basílica de Saint-Denis. Las jambas están decoradas con figuras de reyes y personajes del Antiguo Testamento. Muestran una expresión serena, distinta a la severidad habitual en el románico precedente. Las figuras reales tienen una estatura menor, casi igual que las figuras bíblicas, simbolizando una relación de parentesco entre la realeza y la divinidad. Los frisos de la izquierda narran escenas de la vida de la Virgen en su juventud enfrentándose a la infertilidad, una referencia de la Virgen como una protectora de parturientas y neonatos. Los de la derecha relatan episodios de la vida de Cristo. El timpano está decorado con una escena del Juicio Final con Cristo Pantocrátor enmarcado en una mandorla rodeado por los símbolos de los evangelistas. Cristo alza su mano derecha y sostiene el Libro de la Vida en su mano izquierda. El friso del dintel representa a los doce apóstoles. Las arquivoltas muestran ángeles cantores y el inferior diez figuras que posiblemente sean apóstoles. Las dos arquivoltas muestran los símbolos del zodiaco.
El pórtico derecho muestra la misma estructura. Su tema es la pureza de María y su dignidad como madre de Cristo. En el tímpano figura la Virgen con el niño entronizada entre dos ángeles. Esta representación era una novedad ya que el tema central había estado siempre dedicado a Cristo. También aparecía algo inusual, mostrar hombres comunes entre las figuras divinas.
El rosetón muestra en sus vitrales a Cristo juez en el Juicio Final rodeado por los cuatro evangelistas y ángeles. En los círculos externos ángeles con trompetas y escenas de resurrección, Infierno y Paraíso.
El transepto es ancho aunque no sobresale mucho de la nave principal. Sus fachadas constan de sendos rosetones, el del lado norte con la glorificación de la Virgen y el lado sur la de Jesucristo. Estos se asientan siguiendo las proporciones de la fachada principal y aumentando el efecto de unidad arquitectónica. Se dotaron de tres profundos pórticos ricamente esculpidos y de dos torres en cada una que quedaron sin concluir.

La fachada norte.
En el lado norte el pórtico central muestra la coronación de la Virgen con figuras de profetas y santos. La Virgen está representada a la derecha de Cristo y ambos están rodeados de ángeles en oración y rodeados por una alquería que simboliza el palacio celeste. Las figuras son de igual tamaño y ocupan lugares de igual importancia. A la izquierda en el friso del dintel se representa la muerte de María yaciendo en una cama y rodeada de los doce apóstoles. Su alma, en la forma de un niño, asciende a los brazos de Jesús. A la derecha se narra la resurrección de la Virgen. En el parteluz figura una imagen de Santa Ana con la Virgen niña en brazos (en la actualidad dañada y sin cabeza). Debajo hay una imagen de su marido, San Joaquín, contemplando su rebaño de ovejas mientras el arcángel San Gabriel le anuncia el embarazo de Ana. La segunda arquivolta representa figuras que se cree son profetas del Antiguo Testamento y la tercera y la cuarta muestran los antepasados de linaje de María. La última arquivolta muestra profetas con libros y pergaminos. En los relieves alrededor del arco se narra la creación y caída del hombre. En las jambas hay esculturas que se que corresponden con las de los doce apóstoles. Estas tienen rostros ovalados y son más realistas que las de la entrada oeste.
El pórtico izquierdo está dedicado a la natividad y la anunciación. Las arquivoltas representan a Sansón, Gedeón, Esther y Judit venciendo a los enemigos que simbolizan las amenazas que pesan sobre la iglesia.
Las vidrieras del rosetón muestran en su centro la Glorificación de María con ángeles y el Espíritu Santo. La cubierta de los pórticos está decorada con bajos relieves.
Este portal fue concluido hacia 1270 y cuenta con unas 700 piezas esculpidas. En este es posible apreciar la evolución estilística entre la escultura del siglo XII y la del XIII, aquí las esculturas están más evolucionadas que las de la fachada occidental, con vestiduras que caen de forma más natural y los rostros son más espontáneos y realistas. En la fachada mantiene un tímpano triangular, rosetón de vidrios de colores y las puertas y ventanas con arcos ojivales y arquivoltas descendentes.
El pórtico sur introduce nueva iconografía al estilo de Chartres. El portal central muestra el Juicio Final con esculturas de los apóstoles en las jambas. En el dintel sobre la puerta hay un friso con una visión del Apocalipsis con el cielo y el infierno, hasta entonces ambos temas habían sido tratados siempre de forma independiente. Cristo es representado en el tímpano con rasgos amables y humanos en el Juicio Final (Beau Dieu).  La escena inspira compasión divina, muy diferente a otras representaciones anteriores en las que se intenta resaltar el sufrimiento para inspirar temor a la ira de Dios. Los apóstoles son excluidos de los relieves por lo que son representados en las jambas del portal en mayor tamaño. Esto deja un espacio disponible en los relieves que es ocupado por la Virgen y por San Juan el apóstol.
El pórtico izquierdo está dedicado a los mártires de la Iglesia. El derecho se conoce como el Portal de los Confesores. Este se contrapone al izquierdo. Ambos serán admitidos en el Paraíso en el día del Juicio Final que se narra en el centro. Los vitrales son de la misma época que los del lado norte y muestran la Glorificación de Cristo.
El coro, situado al este, es de cinco naves. El principal problema al que se enfrentó el arquitecto fue la unión armónica con la cabecera. Para ello optó por emplear banos simples y reducir a la mitad el intercolumnio. El coro está separado de la girola por un muro decorado con un conjunto de cuarenta grupos escultóricos que suman doscientas esculturas que narran escenas de la vida de Jesús y de la Virgen.
La cripta de Chartres es enorme, la más grande de Francia y una de las mayores de la cristiandad. Aquí se pueden apreciar los restos de construcciones anteriores sobre los que se asienta la actual catedral que conforman dos criptas concéntricas. Los restos de la iglesia conforman la base del coro y la girola. Se han realizado excavaciones que muestran restos que se remontan a la época romana.
Uno de los elementos más famosos de la catedral es el laberinto trazado sobre el pavimento, de 1205. Es un alicatado circular de 13 metros de diámetro situado en el eje de la nave central en el que baldosas blancas y negras forman un estrecho sendero con múltiples circunvoluciones que conducen al centro. En este círculo central existió una placa de bronce o latón con las figuras de Teseo, Ariadna y Minotauro. Esta fue retirada y fundida en la Revolución Francesa para fabricar cañones. Este laberinto representaba una peregrinación simbólica que el peregrino debía recorrer a pie o de rodillas hasta la roseta central. Las medidas y trazado de este tipo de laberintos tiene un profundo y complejo simbolismo numerológico y filosófico.
El simbolismo de la catedral de Chartres.
La catedral de Chartres por sus proporciones, orientación y simbolismo parece que haya sido construida con la intención de iluminar y elevar el alma humana. Una de estas claves es la ley del número de oro o número áureo que rige las proporciones y distancias entre los pilares y las longitudes de la nave de la catedral, además los cruceros son múltiplos de este número algebraico.
En la portada central de la fachada sur se creó una escena general que inspira compasión divina ya que Cristo es representado con rasgos amables, siendo conocida esta figura como el Beau Dieu.
La fachada norte muestra la imagen de la Virgen junto con figuras de santos y ángeles con una arquería que simboliza el Palacio Celeste. En esta fachada luce un hermoso rosetón, símbolo característico de la arquitectura gótica, representando por un lado el sol y por otro la rosa.
Las vidrieras de la catedral se iluminan y llenan de color el interior. Además el número de figuras o de formas abstractas es simbólico ya    que los cuadrados simbolizan el mundo terrenal o a los cuatro elementos y los círculos representan la vida eterna.
Chartres tiene la suerte de tener el conjunto más bellos de vitrales de los siglos XII y XIII. Este conjunto se ha conservado muy bien a lo largo del tiempo gracias al trabajo de restauración.
La catedral de Chartres es considerada la primera obra plenamente conseguida de la arquitectura gótica. El alzado en tres niveles será la base compositiva de otras catedrales del gótico pleno.

Se convirtió en Patrimonio de la humanidad en 1979 por la Unesco y en la actualidad es un gran símbolo de la arquitectura gótica y es visitado por miles de personas, muchas de ellas peregrinos que pasan por la catedral en sus rutas. Además es una iglesia de culto católico y sede de la Diócesis de la ciudad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.